Cosas frecuentes en las novelas que me empiezan a hartar

Hola! Esta entrada es para comentaros algunas cosas comunes en las novelas juveniles. El hecho es que el finde he estado ocupada con La novena noche y bueno, a medida que iba avanzando me he puesto cada vez de peor humor (no, no le pienso hacer una reseña)

1. Muchas protas me caen mal por ser sosonas e injustas en algunas cosas. Muchas veces la toman con gente cuando ni siquiera se paran a pensar un poco en ellos y se ponen a la defensiva con rabietas. Y lo peor es que suele ser con personas que se preocupan por ellas o con gente aparentemente malvada , que en realidad no lo son. Y es que, vale que tienen algunos motivos, pero podrían pensar un poquito y reaccionar de forma un poco más fría en vez de cerrarse y ni siquiera escucharles con un "tú eres malo y punto". Odio cuando la chica sólo piensa en una cosa con sus propias conclusiones y no reflexiona. O cuando la toman con malos que, bueno, serán villanos, pero jolines que quedan igualmente tontas por no escuchar y usar un poco la cabecita.

2. Autoras que hacen a las protagonistas como a sí mismas. Esto no es algo que me moleste en especial pero sí algo muuuuy común. Incluso yo al principio lo hacía, ¿por qué será?  

3. La escena en que la chica en cuestión se maquilla, se peina, se pone un vestido bonito y, al mirarse en el espejo, ¡milagro! se ven guapísimas. Y ya sea para una cita, un baile, una fiesta o lo que sea no me diréis que esto no lo habéis visto más de una vez.

4. Protagonistas que pierden la cabeza por el chico y ya no piensan en nada más ¬¬ Que sí, que sí, que eso es el amor verdadero y que todo es muy bonito y bla bla bla pero, buuuuuuuuf!!

5. Chico guapísimo, atlético, fuerte, valiente, sexy, popular, atento, elegante, misterioso, miles de virtudes más. Y que, por alguna razón desconocida, oooooh se enamoran perdidamente de la chica que se ve fea pero que él en cambio la ve preciosa.

6. Chicos que al principio molaban y hacían suspirar a la gente pero que son corrompidos por el amor y se vuelven unos locos enamorados sobreprotectores que ante todo protegen a la chica escondiéndola enviándola a lugares seguros y aislados o manteniéndose a su lado sin despegarse y dispuestos a luchar con cualquier ser vivo que se acerquen a menos de tres metros de ella.

7. Todos protegen a la protagonista y se muere cualquiera menos ella (claro que, si se muriera ya no habría novela pero, jolines...)

Aaaaagh, ya me he desahogado. Y, como imaginaréis, la causa de este post, La novena noche, cumple con todos esos requisitos. ¿Y vosotros qué pensáis de todo esto? Acepto más ideas!

Angy.W